El año 2023 ha sido testigo de un entorno económico mundial complejo y en constante cambio. La economía global ha mostrado señales de recuperación, con un crecimiento del PIB mundial del 3,2%, a pesar de las tensiones geopolíticas y los desafíos inflacionarios que continúan presionando los mercados. Las guerras en Ucrania y Oriente Próximo, las disrupciones en las cadenas de suministro y los elevados costes energéticos han seguido perturbando la estabilidad económica y la fortaleza y continuidad de la demanda. Y ello sin olvidar las exigencias regulatorias derivadas de la lucha contra el cambio climático, que se han convertido –especialmente en Europa– en un gran condicionante de ciertos mercados como el automovilístico y toda su industria auxiliar.

En España la economía ha mostrado una notable resiliencia, creciendo un 2,5% – frente al 0,4% de la zona euro–, aunque matizado por una tasa de inflación del 3,1% al finalizar el año, impulsada por los precios de la energía y los alimentos. La demanda interna fue el principal motor de crecimiento, especialmente empujada por el consumo privado y, en menor medida, por las exportaciones de servicios, como el turismo. Asimismo, las matriculaciones de vehículos por fin crecieron con fuerza, un 16,7%, aunque no superaron el millón de unidades, que vimos por última vez en 2019. No obstante, este dinamismo estuvo limitado por factores como el progresivo endurecimiento de las condiciones de financiación (en máximos de dos décadas), la desaceleración de la eurozona y el agotamiento del impulso postpandemia.

Este panorama ha condicionado significativamente el mercado de lubricantes, que ha tenido que adaptarse a nuevas realidades y retos, como el débil crecimiento industrial (la media del Índice de Producción Industrial en 2023 fue un 0,8% inferior a 2022) en comparación con la pujanza de los servicios, que constata la tendencia cada vez más acusada hacia la terciarización de la economía nacional.

Aun así, en 2023 el mercado nacional de lubricantes mostró cierta fortaleza, presentando datos positivos. Según datos la Asociación Española de Lubricantes (ASELUBE), las ventas de sus asociados crecieron un notable 2,9%, lo que refleja la capacidad de los asociados de adaptarse a las fluctuaciones de la demanda. En todo caso, la estimación del mercado total arroja un comportamiento más plano, con un crecimiento del 0,5%, gracias especialmente al mercado de automoción (+1,1%), frente a los lubricantes de uso industrial, los cuales igualaron las ventas de 2022. Unos datos en línea con los del mercado adherido a SIGAUS, que abarca un espectro mucho más amplio ya que, además, integra la comercialización de lubricantes integrados en equipos, componentes o vehículos. SIGAUS arrojó una ligera caída, del 0,4%, más acusada en los lubricantes de uso industrial (-0,6%, frente al -0,2% en los de automoción).

En materia regulatoria, la apuesta europea por la Economía Circular ha seguido dando pasos adelante. Durante todo 2023 se discutieron en las instancias comunitarias dos normas de gran calado que han visto la luz en los primeros meses de 2024. Por un lado, una nueva directiva sobre el ‘derecho a reparar’, uno de los aspectos quizá más olvidados cuando se habla de producir y consumir de forma más sostenible. En segundo lugar, el importante nuevo Reglamento Europeo de Envases y Residuos de Envases que, tras más de un año de negociaciones, supone disponer al fin de una hoja de ruta común para toda Europa, y directamente vinculante (ya que no es una directiva y no requiere de una norma nacional que la adapte) para los países de la Unión.

Precisamente, en España el 2023 ha sido un año de transición en el que se ha comenzado a aplicar la nueva norma de envases publicada en los últimos días de 2022, y que ha introducido la aplicación de la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP) a los envases comerciales e industriales, en lo que supone un claro respaldo del legislador hacia la RAP como un modelo fiable y eficaz para la gestión de residuos y la asunción de los costes asociados. No en vano, asistimos a un progresivo proceso de incorporación de la RAP como herramienta para la gestión de otros residuos que preocupan, como los textiles o los muebles.

En SIGAUS creemos firmemente en la RAP como un valioso catalizador de esa transición hacia una economía más circular. Una convicción que nos impulsa a seguir avanzando en nuestra misión de recuperar y transformar los aceites industriales usados en nuevos productos que evitan el consumo de recursos, como hicimos en un 2023 en el que volvimos a cumplir con creces los objetivos, de lo que damos buena cuenta en esta Memoria de Sostenibilidad. Lo hicimos, además, con una notable eficiencia, ajustando el coste por tonelada gestionada a su mínimo histórico (74,89 €) y trasladando ese ahorro a los consumidores, ya que rebajamos –por primera vez en nuestra historia– un 16% la aportación, de 60 a 50 € por tonelada puesta en el mercado.

Todo ello nos hace ser una verdadera referencia en España en la aplicación de la RAP, especialmente en el ámbito industrial. Un sistema maduro, eficiente, y con una gran penetración tanto en los sectores productores y comercializadores, como en el tejido económico que consume lubricantes y en la industria gestora de residuos industriales.

Y esa misma convicción y esa experiencia nos han hecho, también, poner en marcha la iniciativa de GENCI –a partir del éxito de SIGAUS– para dar una solución multisectorial a la nueva norma de envases. Como representante de la industria del lubricante, es un orgullo ser impulsor de una iniciativa de gestión ambiental que ha crecido y ha ido más allá, convirtiéndose en una sólida propuesta que va a ser de enorme utilidad para muchos sectores afectados.

Asimismo, seguimos avanzando en nuestro compromiso con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). A través de nuestro Informe de Progreso, y también en esta Memoria, analizamos y exponemos nuestras contribuciones a estos objetivos globales, promoviendo prácticas responsables en toda nuestra cadena de valor.

Avanzar en la sostenibilidad y circularidad de los aceites industriales no es solo una misión, es una responsabilidad que asumimos con rigor y pasión, materializados en SIGAUS. Los logros alcanzados en 2023 han sido posibles gracias al esfuerzo y la dedicación de todos los que forman parte de la organización. Como presidente, quiero expresar mi más profundo agradecimiento a todo nuestro equipo, socios y colaboradores. Con su trabajo y compromiso seguiremos impulsando el cambio hacia un mundo más sostenible y una economía más circular.